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Debido a la prohibición del cannabis, millones de consumidores de cannabis y quienes los rodean enfrentan riesgos continuos para la salud y la seguridad. Por lo tanto, es imposible tener una política efectiva de protección de menores y prevención de usos problemáticos.

Los Clubes Sociales de Cannabis son organizaciones sin fines de lucro de ciudadanos adultos. Organizan -dentro de un círculo cerrado- la producción de una cantidad limitada de cannabis para cubrir sus propias necesidades. Los miembros de Cannabis Social Club no pueden revender su cannabis a terceros ni compartirlo con menores.

Sin embargo, existe un sistema de producción y distribución de cannabis que puede reducir los problemas y abaratar los costos de la represión. Un sistema que permite consumir cannabis de forma responsable. Un sistema en el que los organismos estatales pueden tener una idea de todo el proceso, desde el cultivo hasta el consumo.

Los Clubes Sociales de Cannabis son organizaciones sin fines de lucro de ciudadanos adultos. Organizan -dentro de un círculo cerrado- la producción de una cantidad limitada de cannabis para cubrir sus propias necesidades. Los miembros de Cannabis Social Club no pueden revender su cannabis a terceros ni compartirlo con menores.

Los Clubes Sociales de Cannabis pueden surgir en varias formas, dependiendo del marco de la política nacional de drogas dentro de los tratados internacionales de drogas. De acuerdo con las convenciones europeas de derechos humanos, los ciudadanos europeos tienen derecho a formar organizaciones que velan por sus intereses. Si sus actividades no amenazan la salud o la seguridad públicas, los órganos estatales no tienen derecho a intervenir.

Dentro de un club social de cannabis, el cultivo de cannabis puede llevarse a cabo cumpliendo con los estándares sanitarios y de seguridad. Esto significa un uso mínimo de productos químicos, sin robo de electricidad y un riesgo reducido de incendio.

La distribución se lleva a cabo desde el punto de vista de la prevención efectiva del uso irresponsable y problemático. La membresía en Cannabis Social Clubs está restringida solo a adultos.

Un club social de cannabis ofrece una opción viable para revertir el papel de las organizaciones criminales en el mercado del cannabis. Además, reduce el riesgo de que el cannabis se altere por la adición de diluyentes tóxicos como el vidrio.

Actualmente, los Clubes Sociales de Cannabis solo funcionan en España, de acuerdo con las autoridades. En otros países hay iniciativas para fundar este tipo de clubes.

Si quieres fomentar la creación de un Club Social de Cannabis en tu zona, ponte en contacto con nosotros.

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